Madrid cuenta con una extensa red de transporte público que incluye metro, autobuses y trenes de cercanías (Renfe). El Metro de Madrid es uno de los más extensos y eficientes de Europa, con líneas que conectan prácticamente todos los puntos de la ciudad y sus alrededores. Para los viajes dentro de la ciudad, los autobuses ofrecen una amplia cobertura. También hay servicios de taxis y plataformas de viajes compartidos disponibles.
En Madrid, hay opciones de alojamiento para todos los gustos y presupuestos. Desde lujosos hoteles 5 estrellas hasta hostales económicos y apartamentos de alquiler. Los barrios de Sol, Gran Vía, Malasaña y Chueca son muy populares entre los turistas por su proximidad a las principales atracciones y su vibrante vida nocturna.
Madrid es hogar de numerosos lugares de interés histórico y cultural. El Palacio Real, la Plaza Mayor y el Parque del Retiro son solo algunos de los imprescindibles. Además, la ciudad es conocida por su «Triángulo del Arte», que incluye el Museo del Prado, el Museo Thyssen-Bornemisza y el Centro de Arte Reina Sofía.
Madrid es un hervidero de actividades culturales. Los museos mencionados son solo la punta del iceberg, con una oferta que incluye desde arte clásico hasta contemporáneo. La ciudad también es famosa por su escena teatral, destacando los musicales y obras que se presentan en el Teatro Real, el Teatro de la Zarzuela y el Teatro Lope de Vega.
La gastronomía madrileña es un deleite. Desde los tradicionales bares de tapas hasta restaurantes con estrellas Michelin, hay algo para todos. Platos típicos incluyen el cocido madrileño, los callos a la madrileña y, por supuesto, las tapas de todo tipo. El Mercado de San Miguel y el Mercado de San Antón son paradas obligatorias para los amantes de la comida.
Madrid tiene un clima continental, lo que significa veranos calurosos e inviernos fríos. Los veranos pueden ser particularmente calurosos, con temperaturas que a menudo superan los 30°C. Los inviernos son generalmente fríos, con temperaturas que pueden bajar de 0°C. La primavera y el otoño son generalmente agradables, con temperaturas moderadas y menos turistas.